I N S T I T U T O O S C A R M A S O T T A 2
D e l e g a c i ó n R í o G a l l e g o s
VIOLENCIA, PAREJAS Y ACTUALIDAD
(Texto
publicado en el diario La Opinión Austral, el día 30 de Septiembre de 2015)
Autor: Lic. Erica Boglione
(Miembro de la Delegación Río Gallegos del I.O.M.2)
En la época actual, nos encontramos
con el cuestionamiento franco a los Ideales que representaban la
autoridad y que garantizaban un ordenamiento particular. El Ideal que
regía en la cultura, que establecía un tipo de lazo social, un modo
de relacionarse que regulaba el goce (el modo de satisfacerse de un
cuerpo), es denominado por el psicoanálisis de la orientación
lacaniana “el Nombre del Padre”. Cuando el nombre del
padre establecía un orden en los modos de gozar, se establecían
mandatos paternos a los que se obedecían y la familia se constituía
sobre la base de la unión heterosexual y se intentaba regular los
modos en que los sujetos deben aparearse, tener a sus hijos y gozar
con sus cuerpos. Hoy en día este mandato está en declive, ya no es
eficaz para dar cuenta de las transformaciones contemporáneas. Y lo
real (lo que en psicoanálisis designamos como lo imposible de
nombrar o de simbolizar, como la angustia o el goce mortífero que va
“más allá” de la mera obtención del placer), encuentra
nuevas maneras de ordenarse o desordenarse entre los sexos. “El
lazo entre los sexos se ha convertido en guerra entre los sexos”
y el femicidio pone en escena el “desorden de lo real”,
según nos afirma Irene Greiser (“El declive de la autoridad
paterna y su incidencia en los síntomas actuales”, en “Delito
y Transgresión”, Ed. Grama 2008).
Por un lado, desde los medios de
comunicación asistimos a las modalidades en que los cuerpos de las
mujeres son quemados, acuchillados, descuartizados, ultrajados,
cuerpos convertidos en objetos desechables en bolsas de plástico.
Este fenómeno -que se propaga mundialmente al estilo de una peste-
es uno de los nombres del malestar