I N S T I T U T O O S C A R M A S O T T A
D e l e g a c i ó n R í o G a l l e g o s
PASOS ENCONTRADOS: ARTE Y PSICOANÁLISIS
(Texto publicado en el diario La Opinión Austral, el día 29 de Agosto de 2012)
Autor: Lic. Mariana Filippo
(Responsable local del I.O.M. - Delegación Río Gallegos)
A- Hasta el
31 de agosto, en el Museo Minicelli, estará la muestra “LOCAL”
del artista plástico, José Luis Tuñón y tuvimos la oportunidad de
conversar con él:
-¿Cómo
fue tu encuentro con el arte y el psicoanálisis?
J.L.T:
Al arte lo encontré mucho antes, casi saliendo de la infancia. Un
día descubrí que la perspectiva se resolvía usando varios tonos de
un mismo color. Lo observé en unos árboles y fue todo un
descubrimiento. A partir de ahí el arte estuvo siempre presente. Al
psicoanálisis lo encontré cuando fui a estudiar medicina a La
Plata. Me encontré con los textos de Freud y Melanie Klein. Ya
terminaba la carrera y había decidido hacer psiquiatría. Allí
también empezó mi primera experiencia de análisis y los primeros
grupos de estudio. Era en el año 79, el año en el que me recibí de
médico y empecé mi formación en el Hospital Alejandro Korn. Años
difíciles. Un poco antes, en el 76, me había encontrado con quién
fue mi maestro de pintura Oscar Levaggi, en esos años el taller fue
un refugio. Estuve con él hasta el año 81. Después seguí solo.
-
Y¿cuándo fue tu primera exposición? Supongo que entre la
experiencia del arte y dar muestras de esa experiencia hay un paso
significativo
J.L.T.:
Expuse varias veces como integrante del taller. Pero la primera
muestra individual, que fue significativa, fue en el 81, en una
galería de Buenos Aires, que ya estaba en sus finales, pero fue
mítica, la galería Lirolay. Fueron dibujos y recuerdo que vendí mi
primera obra…Y si, hay un paso en el que se autoriza a sí mismo,
como decimos en psicoanálisis. Antes de ese paso la influencia de mi
maestro era muy notoria.
-Que
interesante! De qué manera ese taller de arte fue un “refugio”
para vos?
J.L.T:
En cuanto al refugio, tiene que ver con lo que se conoce como los
años de plomo. La Plata estaba militarizada y la violencia de estado
era omnipresente. Ahí el taller de Levaggi era un lugar de discusión
y encuentro. Un poco anacrónico, porque estudiábamos a los
cubistas, en 1979!, pero ese resalto temporal fue importante.